Adrián cumplía 7 años y es un apasionado de los todoterreno. Sus padres tienen uno y me consta que hacen muchísimas rutas en familia.
Esta tarta supuso un desafío, porque está en el aire y además ligeramente inclinada, pero el resultado les gustó mucho.
Aquí os pongo unas fotos vistas desde todos los lados
Y como siempre, les pedí que si podían le hicieran una foto del corte:
Capas de bizcocho de vainillas, rellenas de chocolate con leche y cubierto todo con fondant.
La idea era hacerlo con los detalles mas significativos del todoterreno familiar